Hace cinco años que Abram obedeciendo la voz de Dios, ha salido de entre su pueblo, su parentela y la csa de su padre. Hace ya mucho tiempo que salió de las costumbres y cultura que por muchos años fueron su fuente de aprendizaje, su oficio, su ideal, en fín, toda su vida.
Muy posiblemente a sus sesenta y cinco años de edad, Abram pensaba en jubilarse, gozar del fruto de su trabajo de toda la vida, retirase junto a Sarai su esposa y viajar por ahí, disfrutando lo mejor del mundo, no tenian hijos que acarrear, solamente eran ellos dos.
Pero a sus sesenta y cinco años, su devoción por buscar un ser supremo, lo llevan a encontrarse con el verdadero Dios, el creador del cielo y de la tierra, y sorpresa!! en lugar de jubilarse, Dios le dice dice que deje atrás todo su status social, que salga a una tierra que no conoce, y Abram accede a la petición divina.
Cinco años más tarde, a sus setenta años, Dios le confirma que va a bendecirlo en gran manera, y Abram empieza una conversación atrevida con el creador, lo que nos falta a mucho de nosotros, ser atrevidos, no irespetuosos con Dios, pero si específico s y determinados a la hora de hablar con El.
Bueno, pues Abrram empiza a usar su lógica con Dios, casi podemos escuchar lo que pasa por su pensamiento al dialogar de esa manera con el Señor. No puede ser que me bendigas grandemente si no tengo un descendiente que goce lo que tu me vas a dar, no tengo a nadie, mis parientes se quedaron en Ur modelando figuras de ídolos, culturizandose, estudiando las estrellas, haciendo maravillosas obras de arquitectura. El úmico que venía conmigo era mi sobrino Lot, pero hasta de el tuve que separarme porque no agarró mi visión, jamás quizo hacer altar a tu nombre conmigo, no me queda nadie más para que gocemos junto con mi esposa de bendiciones, excepto el esclavo que por años ha estado a mi lado: Eliezer.
Y la compañia de Eliezer en las jornadas de Abram no era casualidad, no fue cuestión del destino, claro que no, con la compañia de Eliezer Abram agarraba valor, confianza, esperanza, fuerzas, sabia que de alguna o de otra forma, Dios estaba con el para ayudarle. Y eso es exactamente lo que significa el nombre de Eliezer, Dios es mi ayuda, el nombre de este esclavo era un recordatorio para Abram que había alguien mayor que el a su ladom para asistirle en lo que fuera necesario, tenía la ayuda de Dios.
Entre lineas, podemos notar que Abram le está haciendo un recordatorio a Dios sobre la palabra que le prometió allá en Ur de los caldeos, El, Dios, se había comprometido a ser su ayuda, y si va a ser bendecido grandemente, necesita la ayuda de Dios para heredar a un descendiente de su linaje, de su sangre, de sus lomos.
Dios ha prometido estar de nuestro lado, por mi parte, necesito de su ayuda en todas las áreas de mi vida, pero necesito recordar que tengo un ayudador, que si ha prometido bendecirnos, también nos va a capacitar para administrar su bendición.
Si siente que está solo en su circunstancia personal, vuelva a ver a su lado, ahí está su ELIEZER, recordádole que Dios es su ayuda!!!
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