Esta semana nos ha tocado mudanza, muy a mi pesar( como todo buen hombre, huyo de cambiarme de casa) nos ha tocado una semana de mucho trabajo físico y espiritual.
Por alguna que otra razón fue un cambio de casa express, en menos de 12 días ya teníamos donde vivir, mi esposa, como la mayoría de esposas, disfruta mucho cambiarse de casa por la novedad del vecindario, las cosas viejas que hay que tirar(generalmente son las mías, no sé porqué, jajajaja) y las cosas nuevas que hay que incorporar a la nueva vivienda, que si esto, que si aquello...en fín, un ir y venir de cosas que hay que mantener y otras que descartar.
Descartar las cosas que no nos servirán en esta nueva casa es tarea fácil, va a ser aburrido, pero es parte del proceso y es muy sencillo darse cuenta de las cosas que si vana aservir en este lugar y las que no, pero.... me gusta mucho ver el lado espiritual de las cosas e indagar un poquito más a fondo sobre lo que verdaderamente es importante en nuestra vida: nuestro interior.
Mi pastora y madre esprirtual tiene una forma muy peculiar y bíblica de vivir la vida cristiana, valga la redundancia, y es la declaración de palabras de fé.
Una de sus frases de batalla es "EL RECHAZO PERDIÓ MI DIRECCION", y justamente a pocos días de este cambio de domicilio viene a mi mente esta declaración.
Cuantas cosas vienen a querer cobrarnos en un presente en el que ya tenemos alguién que pagó por nuestros pecados, Jesús, pero vuelven nuevamente el rechazo, el odio, la mentira, el menosprecio, la enfermedad, la escasez, la duda, a nuestras vidas para impedirnos vivir plenamente bajo la voluntad de Dios.
Pues la solución es simple: cambiemonos de domicilio espiritual, dejémonos guiar por Dios hacia nuestra "tierra prometida", donde madie nos conoce, donde la única referencia que tienen de nosotros es que con nosotros está un Dios que es todopoderoso.
La próxima vez que nos sintamos vulnerados en nuestra fe, declaremos que el rechazo perdió nuestra dirección, que la enfermedad no puede encontrarnos porque ya no vivimos esperando a que horas nos vamos a enfermar.
No se cual sea su caso, pero esta mañana yo me he levantado declarando que "LA ESCASEZ PERDIÓ MI DIRECCION"
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